Así me dijo: ábrete como el loto
en la laguna
en la laguna
para sacarte el barro,
abre las piernas
como los pollitos en la cocina
como los pollitos en la cocina
antes de ponerlos al horno:
mis pies marcaban los hemiferios
donde el jote
donde el jote
escapó en mi volantín,
la calle que nunca veía las lluvias se quedó
en mis zapatos,
mis calcetines volaban en el cielo
y la sombra gemía
entre los alborotados árboles
entre los alborotados árboles
sus dedos me enfriaban bajo la ropa
yo sentía su rasguño.
yo sentía su rasguño.
El silencio inmenso de la casa
mugía en mis sienes
mugía en mis sienes
las baratas arañaban los rincones
que guardarían los secretos
y la sangre usurpadora,
y la sangre usurpadora,
el impostor del dulce cuerpo
del pequeño cuerpo
del pequeño cuerpo
se quedó en mi niñez
y yo
rompiendo caracoles
y yo
rompiendo caracoles
así,
cuando los machaco
esa baba escurre
y en mi oído
un resuello
un olor.
cuando los machaco
esa baba escurre
y en mi oído
un resuello
un olor.